Hablar de criptomonedas a estas alturas es algo ya que se ha tornado en un tema de conversación de lo más común tanto en sectores más expertos en este ámbito de las inversiones online como fuera de ellos, habiendo sufrido una popularización muy relevante en los últimos meses. Esto es un hecho que ha derivado en que las transacciones para la compra y la venta de diferentes divisas virtuales se hayan multiplicado de manera exponencial durante el pasado 2017, alcanzó puntos con los que hasta ahora era difícil incluso soñar.
El interés acerca de todo lo concerniente a las criptomonedas es, por ende, mucho mayor ahora que hace unos meses, pero no solo en lo referido a las inversiones. Las monedas virtuales cuentan con una tecnología detrás que es la que realmente acrecenta todo el atractivo de las mismas, con unos conceptos y una terminología que ahora resulta más necesario que nunca conocer.
Es común entre los recién iniciados en el mundo de las criptodivisas preguntarse qué es un fork o qué son las bifurcaciones, por ejemplo, los cuales se utilizan con frecuencia en foros o blogs especializados y requieren de un conocimiento previo para conseguir entender el contexto general que se está tratando.
Índice de Contenido:
¿Qué es un Fork?
El término fork se puede traducir al castellano como bifurcación, aunque la terminología en inglés suele ser la más utilizada cuando se habla de criptomonedas.
En líneas generales, un fork supone un cambio en el código original de una criptomoneda o de una plataforma de criptodivisas, el cual está destinado a modificar dicho código para crear variaciones en el sistema.
Como todas estas plataformas están basadas en software libre, esto puede llevarse a cabo sin mayores impedimentos siempre y cuando se tengan los recursos necesarios para ello.
Mediante esta vía, el código original sufre alteraciones y se termina creando un producto distinto que, bajo la opinión del nuevo creador, cuenta con las mejoras necesarias para ser mejor que del que se partió, al menos en la teoría. Todo ello es lo que ha dado lugar al surgimiento de otras muchas monedas y plataformas en los últimos tiempos, pues realmente cualquiera con conocimiento en el terreno podía comenzar a implementar sus modificaciones de manera rápida y eficaz.
No obstante, modificar el código de un determinado software, y más aún en lo referente a las criptomonedas, no es algo que pueda realizarse a la ligera, puesto que hay que tener en cuenta todas las implicaciones que hay detrás de esto. Para poder hablar de manera apropiada de las bifurcaciones hay que considerar y distinguir entre las dos que existen y que son las opciones que un desarrollador o grupo de desarrolladores ha de elegir cuando se dispone a modificar un código: estamos hablando del Hard Fork (o bifurcación dura) y del Soft Fork (o bifurcación suave).
Los ‘Hard Fork’
Realizar una bifurcación dura supone, en términos generales, renunciar al plan establecido en un primer momento para crear un nuevo proyecto basado en el original sin tener en cuenta la opinión o las preferencias de la plataforma en su conjunto.
Imaginemos una red de blockchain sobre la que se basa una criptomoneda que está, a su vez, basada en nodos o cápsulas independientes que garantizan el funcionamiento. Una parte de la plataforma quiere que se actualice el sistema –los nodos– para dar lugar a otro mejor (o diferente, al menos), pero no son la gran mayoría de ellos.
Cuando esto sucede, se produce el denominado Hard Fork, que supone el seguir adelante con esa actualización o cambio sin que se integre con la plataforma original, dando lugar a dos variedades distintas, ambas basadas en lo mismo pero incompatibles entre sí por sus características particulares. Esto ni es malo ni es bueno, sino que únicamente aporta otro punto de vista sobre lo que existía y da lugar, por ejemplo, a una nueva criptomoneda basada en otra anterior.
Este es un caso que podemos contemplar entre dos de las plataformas más populares del momento: Bitcoin (BTC) y Bitcoin Cash (BCH) o entre Ethereum (ETH) y Ethereum Classic (ETC).
Los ‘Soft Fork’
Evidentemente, una bifurcación suave ya anticipa con su propio nombre que los cambios que se van a llevar a cabo no van a ser tan drásticos como en el anterior caso. También es más difícil de conseguir, dado que para poder llevar a cabo un Soft Fork es necesario contar con el apoyo de la gran mayoría de los nodos que componen la red. Esto significa que tiene que haber una muy amplia mayoría que esté totalmente de acuerdo con la actualización o los cambios que se quieren implementar para poder así hacer esto efectivo.
De llegarse a ese escenario ideal, lo único que sería necesario es que todos los nodos de la red se actualizaran al mismo tiempo, comenzando así a soportar los cambios de manera inmediata y no viéndose interrumpido el uso de los mismos debido a incompatibilidades, como ocurre en los Hard Fork.
A cambio de no enriquecer la plataforma con nuevas versiones que den lugar a nuevos escenarios plurales, con un Soft Fork se crea una red mejor y más consistente de cara al futuro, implementando actualizaciones que permitan solventar problemas relevantes.
En definitiva, todo lo que motiva y hace las veces de motor de cambio en los referido a las bifurcaciones radica en el consenso y en la capacidad que se tenga para que un determinado cambio consiga calar o no en una determinada plataforma. Los fork de criptomonedas son algo muy habitual dentro de este panorama tan cambiante que son las divisas virtuales y representa también en cierta medida el constante espíritu de renovación que se aprecia en este panorama. Con el auge que viven hoy en día, las bifurcaciones serán una acción cada más constante.
La polémica de los Fork
Una de las mayores controversias que existen alrededor de los Fork reside en la inutilidad de algunas de estas bifurcaciones. Al ser un software libre, casi cualquier persona con los conocimientos necesarios podría llevarlo a cabo, pero necesita cierto apoyo para que realmente sea efectivo. Sin embargo, si lo consigue, podría hacer un Hard Fork de cualquier moneda y crear una nueva. Normalmente, se les entrega la nueva moneda a aquellas personas que tienen la antigua en una proporción de 1-1.
Así pues, actualmente, hay muchas discusiones sobre la verdadera finalidad de muchos forks que se suceden como Bitcoin Gold, Bitcoin Diamond o Litcoin Cash. ¿Son realmente útiles o los creadores solo buscan esas monedas gratuitas?